ASAMBLEA MUSICAL. Una manera diferente de hacer un concierto
Después del ejercicio que supone convertir un concierto convencional en una obra de teatro musical en toda regla, aquí tenemos la prueba fehaciente.
La evolución del Arte es lo que hace de él algo dinámico y en continuo movimiento. Tratar de conseguir «algo más» es lo que me ha motivado durante todos estos años de carrera. Llegó un momento que la simple sucesión de composiciones (en directo), no me satisfacía del punto de vista artístico. Llevaba 20 años haciéndolo y se me quedaba pequeño.
Intentando darle la vuelta a «la tortilla», empecé a idear los conciertos como historias, con principio y fin, donde trataba de asociar las canciones a situaciones reales (basadas en las ideas que me inspiraban dichas canciones).
Así, después de varios años experimentando, hemos llegado (y digo «hemos» porque en realidad sería injusto apropiarme de un trabajo que ha hecho un montón de gente conmigo) a conseguir hacer una extraña pieza de Artes escénicas. No es un concierto. No es una obra de teatro.
Júzguen ustedes mismos