Resulta curioso como la mayor parte de nuestra clase política, cuando llega el final de su periplo por cortes generales, asambleas regionales… acaban trabajando para las grandes corporaciones, empresas energéticas, entidades financieras…                                        Propongo no dejarles escapatoria. Cuando salgan de la carrera política (que según el art.2 de la Ley Pro-testa ha sido una carrera de mileurista), sigan con su labor de «SERVICIO PÚBLICO» en esas entidades financieras. Pero también cobrando mil euros al mes… Ya estoy viendo a «la casta» haciendo las maletas para irse al extranjero a buscar trabajo (como nuestros científicos y médicos pero con la diferencia de no tener nada que ofrecer a la Humanidad)… el problema es que fuera de España no son nadie, ni tienen desarrolladas las redes de contactos mafiosos de los que se benefician aquí. La falta de empatía de los gobernantes con el pueblo, se refleja después perfectamente con su incorporación a los Consejos de Administración de entidades financieras y energéticas, donde, sin tener ni puta idea de lo que deciden, votan sí o no según la tendencia general de dichos Consejos, que es la de mantener sus status y comisiones en las operaciones que se realizen. Desde la Ley Pro-testa se propone el Tratado del Banquero Mileurista, que viene a decir:
«La Banca será estatal y buscará el beneficio social. Los sueldos de los banqueros, nunca serán “a dedo”, Prestarán dinero por obligación y lo harán sin comisión. Para el banquero ladrón, no existe perdón».

Acabemos con los privilegios de los que, al fin y al cabo, son los verdaderos responsables de la situación en la que estamos (nótese que no digo culpables, aunque en algunos casos lo sean, porque en sus sueldos está incluida dicha responsabilidad)